Ordenan al gobierno de EE. UU. responder sobre aislamiento de Rafael Caro Quintero
Dependiendo de la respuesta de los fiscales, el juez podrá decidir si ordena un cambio en el régimen de reclusión.
El juez federal Frederic Block instruyó al Departamento de Justicia de Estados Unidos a fijar un posicionamiento sobre las condiciones de reclusión del narcotraficante mexicano Rafael Caro Quintero, tras acusaciones de sus abogados sobre un aislamiento prácticamente total.
En un documento judicial fechado el lunes 11 de agosto, el juez solicitó a los fiscales que, a más tardar el lunes 18 de agosto, respondan a los señalamientos de la defensa y manifiesten si están de acuerdo o no con modificar las condiciones de encarcelamiento.
Dependiendo de la respuesta de los fiscales, el juez podrá decidir si ordena un cambio en el régimen de reclusión del capo. Existe la posibilidad de que se convoque a una audiencia especial para discutir el tema si el magistrado lo considera necesario.
Caro Quintero se encuentra desde febrero en la cárcel metropolitana de Brooklyn. La defensa, en una carta de 18 páginas enviada la semana pasada, aseguró que el capo está sometido a un confinamiento especial similar al que se impone a acusados por terrorismo, sin que existan condiciones que lo justifiquen.
Según la defensa, Caro Quintero está "esencialmente confinado en una celda pequeña y sin ventanas, solo 23 horas al día de lunes a viernes, y 24 horas durante los fines de semana, sin posibilidad de ejercicio". También señalaron que sus comidas se entregan por una ranura en la puerta y debe comer solo, con la luz encendida permanentemente y aire acondicionado irregular, además de falta de ropa de abrigo adecuada.
Los abogados advirtieron que esta situación afecta tanto la salud física como mental del reo, además de limitar severamente su contacto con familiares y defensores, dificultando una defensa adecuada. Calificaron estas medidas como un "castigo por adelantado" para alguien que aún no ha sido juzgado ni declarado culpable, y que por tanto debe ser considerado inocente.
Rafael Caro Quintero enfrenta múltiples cargos por narcotráfico y por ordenar el asesinato del agente de la DEA Enrique "Kiki" Camarena hace 40 años. Aunque los fiscales anunciaron que no buscarán la pena de muerte, el proceso sigue abierto y en septiembre habrá una audiencia para revisar el caso.
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